Blogia
Marilyn...del Cuyaguateje

Benedetti: Bardo de gran talla

Benedetti: Bardo de gran talla

Los públicos constituyen el termómetro idóneo. Cuando una noche frente a la pantalla  televisiva se torna larga y monótona de acuerdo con las preferencias personales, la lectura pasa ocupar las palmas.

Así de recurrente y más a tono por estos tiempos convulsos, textos de Mario Benedetti se repasan reiteradamente.

Así estamos/ consternados/ rabiosos/ aunque esta muerte sea/ uno de los absurdos previsibles, escribió el propio Benedetti en aquellos versos inolvidables dedicados al Che.

La obra de uno de los escritores latinoamericanos más apreciados y leídos de estos tiempos, es conmovedora; su lírica sugestiva y provechosa, profunda y sagaz signan al autor de Hagamos un trato, Táctica y estrategia, Torturador y espejo, Padrenuestro latinoamericano, Quemar las naves o No te salves.

El escritor de la llamada Generación del 45 visitó varias veces Cuba. Casa de las Américas devino hogar donde halló coincidencias ideológicas, políticas e intelectuales. Desde su primer viaje aquí en 1966 para conformar el jurado de novela del concurso literario convocado por la institución que hoy preside Roberto Fernández Retamar se nos hizo más cercano, más nuestro.

También al siguiente año regresó de nuevo y fundó el Centro de Investigaciones Literarias. Junto a su esposa se convirtió en uno de los más incansables colaboradores de esta, su casa en La Habana.

Entre sus novelas más solicitadas muchos recuerdan La tregua, Gracias por el fuego, La casa y el ladrillo, El cumpleaños de Juan Ángel, Primavera con una esquina rota, o Las soledades de Babel.

Benedetti hizo suya la Revolución Cubana y el hecho de que  podamos disfrutar su fecunda labor literaria es gratificante. Su excelente literatura y su proyección social merecen por siempre elogios y admiración.

0 comentarios