Belleza y sonidos de los violines Stradivarius

Los violines Stradivarius son mundialmente famosos. Su creador Antonio Stradivari, nació en Cremona, Italia, alrededor de 1643, y murió el 18 de Diciembre de 1737. Fue el más grande laudero de todos los tiempos por la genialidad y perfección con las que diseñó y construyó sus violines. por estos días de aniversario de su muerte, le recordamos
Sus instrumentos son admirados por su belleza y sonido. Heredero de la tradición italiana a través de su Maestro Nicolás Amati, sus aportaciones llevaron a la familia del violín a la perfección de forma y sonido que actualmente conocemos por su especial elección de la madera, la acabada proporción, la altura del puente, la adecuada longitud de las ranuras y la composición del barniz empleado en el ensamble; que son los maravillosos secretos de la familia Stradivari.
Desde muy joven fue enviado al taller del famoso violero Nicolás Amati, y a partir de 1676 comenzó a firmar sus propios trabajos, que ya revelaban su hábil genio. Desde 1660, libre ya de los métodos de Amati, empezó su esplendor con instrumentos originales de gran perfección, alcanzando sus mejores resultados entre 1700 y 1725.
Siempre se esmeró en la selección de la madera, bien añeja, y del inconfundible barniz amarillento-rojo, que peculiarizaron a sus violines, sobre todo por su fascinante voz, robusta y nítida en agudos, medios y graves.
De su taller salieron violas, violoncellos y violas de gamba que son obras maestras; laúdes, mandolinas y guitarras de fina elaboración, y desde luego, los invaluables violines; todos ostentando la etiqueta con la leyenda: "Antonius Stradivarius Cremonensis Fecit Anno…", o bien: "Antonius Stradivarius Cremonensis Feciebat Anno…".