Pavarotti y su herencia

Ante la inminencia de su muerte, el 5 de septiembre último, a los 71 años, Luciano Pavarotti afirmaba haber sido un hombre afortunado y feliz en la vida, pues lo había tenido todo, realmente todo. Solo se lamentaba de no haber tenido tiempo para hacer "un dueto con la cantante pop Mina, poner en marcha una escuela de canto con Freni y Kabaivanska..."

Después leí en una publicación española que a sólo cuatro días de su muerte, después de emotivo y espectacular entierro, rápidamente el mundo supo que el supuestamente idílico segundo matrimonio del tenor no lo era tanto, así como que las dos mujeres que encabezan las dos familias que tuvo, tendrían desavenencias sobre el reparto de su fortuna, cifrada en unos 200 millones de euros, más 15 propiedades en Italia, Estados Unidos y Mónaco.

Según el diario La Stampa se aseguraba que Nicoleta Mantovani, la última esposa, se llevaría una desagradable sorpresa en cuanto se abriera el testamento de su marido, pues al parecer, un mes antes de morir, éste lo modificó por segunda vez. El original lo había dictado en Nueva York, antes de ser operado del cáncer que sufría.

Que la estrella descanse en paz y que ese dinero acumulado, por favor, no separe a la familia.