La Leche que da la vaca
La vaca Pijirigua fue tema de una tarareada canción por los años 80, y todo porque prefería vivir a la antigua, que aceptar la inseminación artificial. Cuánta rica leche dio a los de su comarca…vaya usted a saber, pero de lo que sí doy fe es de que se hizo famosa por su razonamiento.
Y ella me vino a la mente cuando leí en un cable, siguiéndole los pasos a un colega, lo siguiente: ¨ La música del compositor austríaco Wolfgang Amadeus Mozart, aumenta la producción lechera de las vacas, aseguraron los administradores de una lujosa cooperativa española con la cual sus animales mejoran la cantidad y calidad de su producción, luego de exponerlas a las notas musicales del genio de Salzburgo ¨.
Esto ocurre en la granja de Chirigota, ubicada en las afueras de Madrid y, según se afirma, las rumiantes que escuchan plácidamente las maravillosas composiciones del genio dan hasta cinco litros más como promedio, no se duermen y mantienen una relajación y una laxitud envidiables.
En mi provincia los municipios de Mantua y Bahía Honda se autoabastecen ya del preciado alimento, es decir, que el Gobierno y el Estado no tienen que asignársela. La empresa pecuaria Camilo Cienfuegos, de Consolación del Sur, con más de 492 000 litros de leche entregados al Estado, este año ganó seis millones de pesos como resultados de las ventas y tuvo de pérdidas alrededor de dos millones de pesos debido a los dos huracanes que nos azotaron en 2008, Gustav y Ike.
La raza que predomina en esa destacada entidad es la Siboney, de la que totalizan 13, 200 ejemplares.
Y otro éxito de los pinareños en la materia es la producción este año de 15 000 litros de leche de chiva.
Si estas vacas oyeran la música de Mozart, de seguro aumentarían las entregas, pues le serviría de relajamiento total a su calidad de vida, que aunque no se fundamenta en la antigua como Pijirigua, también las hace famosas a pesar de no ser tema para una composición musical. De lo que sí estoy segura es que la preferirían a esos reguetones que andan sueltos por ahí….
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