El Chelsea se lo sabe de memoria

EL BONITO SUEÑO DEL FENERBAHCE SE TOPÓ CON LA COMPETITIVAD 'BLUE'

Lo llaman saber competir, o eso dicen. El Chelsea se lo tiene aprendido de memoria. Los 'blues', haciendo gala de sus valores de siempre, sin fisuras, acabaron con el sueño de un Fenerbahce que se vio superado por el partido. En la temporada que menos se habla de este Chelsea, los londinenses siguen teniendo la corona entre ceja y ceja. El final de la obsesión sigue en el horizonte.

Stamford Bridge y su lugarteniente fueron demasiado para los turcos. El gol de Ballack a los 4' acabó demasiado pronto con la ventaja de la ida, ésa que cimentaba las opciones del Fenerbahce. Los de Grant tuvieron el asunto a su antojo antes de lo esperado y, ahí, se desenvuelven como pocos.

El Chelsea pudo tirar de sus mortales embestidas casi desde el principio. La pareja de centrales sobrehumana, la velocidad por los costados, la llegada de su centro del campo y el gigante Drogba, no por medir dos metros, asustaron a unos turcos apagados y perdidos.

Joe Cole avisó minutos después del gol de Ballack con un remate al palo tras una gran jugada de un Kalou con el que soñará Gokhan Gonul, su par, durante mucho tiempo. El Fenerbahce atrapó el cuero cuando le dejaron, cayendo en la telaraña de un Chelsea que tiene planes de todo tipo para acabar con el rival.

Empeñados

La lesión de Cudicini, que obligó la entrada de Hilario entre los tres palos, no trastocó los planes 'blues'. El Chelsea dejó que los turcos se hartasen a no ver huecos en campo contrario, esperando la picadura de Drogba, valor seguro. Además, el Fenerbahce se empeñó en olvidarse de unas bandas que su enemigo demostró que son fundamentales para sorprender y golpear.

El paso por vestuarios no cambió el guión de un partido que le vino grande a los de Zico. Sólo Lugano, tremendo toda la noche, ofreció su mejor versión. No fue suficiente. El Fenerbahce no probó al meta local hasta los últimos minutos, atónitos ante la lección del Chelsea. Los 'blues' te dan el balón y te convierten en un falso dominador, engañoso, al borde del k.o al recibir las sempiternas contras de este equipo.

Regreso al campo de batalla

Grant retocó su equipo sustituyendo a Kalou y dando entrada a Belletti. Essien, lateral hasta ese momento, pasó a fortalecer la zona ancha sin ningún problema. El africano, toda una fuerza de la naturaleza, se encargó de tapar los pocos huecos que permitió el Chelsea.

A pesar de todo, los 'blues' replegaron demasiado posiciones en el último tramo. Un error que no tuvo consecuencias por la inocentada del Fenerbahce. Kezman entró por Maldonado sin variaciones de cara al desenlace. Ya en el 87', Lampard cerró el choque al rematar un pase de la muerte de un Essien que cumple sus objetivos por las buenas o por las malas.

El Chelsea regresa a las semifinales y volverá a vérselas con su bestia negra de los últimos tiempos, el Liverpool. Se repetirán las batallas de época de años pasados. Buenas noticias para una Champions que habla el idioma de Shakespeare.

(MARCA.COM)