Raíces canarias

El tema vino a colación a raíz del quinto aniversario de la muerte de ese gran bailador de flamenco que fue Antonio Gades, el pasado 20 de julio, cuyos restos se encuentran en nuestro país. Estamos muy ligados a España, un gran número de nuestros abuelos y bisabuelos tiene allí sus raíses, por eso saber que los antepasados de la mayoría de los cubanos descienden de la península ibérica no es un descubrimiento ni noticia para ningún hijo de esta Isla, ellos fueron los precursores de los criollos (así se denominaban los nacidos en Cuba) quienes forjaron la identidad nacional. El gran ajiaco étnico cultural, al que hacen referencia en más de una ocasión los intelectuales cubanos, entre ellos sobresalen Fernando Ortiz, Alejo Carpentier, Nicolás Guillen,  se formaría como una necesidad histórica al traspolarse hacia el caribe las culturas, españolas y africanas traídas por amos y esclavos. Desde la vieja Europa se emigra hacia el nuevo mundo con la ilusión de vencer las ataduras feudales y obtener una riqueza fácil para retornar a la patria. Para muchos el viaje de ida no tuvo regreso, y la bienamada patria solo viviría perennemente en el recuerdo de aquellos que la abandonaron por un tiempo. España como potencia colonizadora aporta la mayor cantidad de emigrantes, estos proceden de todas las regiones del país y se asientan por toda la geografía cubana, desde la punta de Maisí en el oriente,  al Cabo de San Antonio en el occidente. Las Islas Canarias, territorio de ultramar de España, aportan una alta cuota de emigrantes la que se intensifica en los años de la postguerra del 1895 – 1898. Pinar del Río no estaría exenta de esta emigración. Poblados como Candelaria, San Luis, Pinar del Río y los Remates de Guane, entre otros reciben una fuerte inyección de estos isleños. El canario que emigra a Cuba viene con el fin de hacer dinero y regresar a su lugar de origen. Ellos son portadores de una cultura muy peculiar donde el trabajo es la principal herramienta para el sostén de la familia. Traen consigo su modo de preparar los alimentos, de vestir y trabajar la tierra, introduciendo mejoras en las labores agrícolas al aportar elementos de labranza desconocidos en la Isla como fue el arado de madera y la forma de enyugar los bueyes para el laboreo de la tierra. La presencia canaria aún es fuerte en la Isla y en especial en el occidente cubano donde viven muchos descendietes de aquellos colonizadores. El intercambio cultural entre ambas regiones es intenso muestra de ello es la visita a la provincia por embajadas culturales de esas islas del atlántico.