Blogia
Marilyn...del Cuyaguateje

La Loynaz en nuestro jardín en su natalicio

La Loynaz en nuestro jardín en su natalicio

Con la presentación del libro “La hija del General”, de Vicente González Castro, a cargo de la Doctora María Dolores Ortiz, comenzó en Pinar del Río el homenaje de recordación a la autora de ¨Jardín¨, Dulce María Loynaz, en el aniversario 106 de su natalicio. Personalidades de la cultura nacionales y de la provincia asistieron al evento.

También se desarrolló un panel por los 50 años de la publicación de “Un verano en Tenerife”, con la participación de Juan Ramón de la Portilla, director del centro Hermanos Loynaz; Carmen María Torres, profesora de la Facultad de Letras de la Universidad de La Habana y Zayda Capote, investigadora del Instituto de Literatura y Lingüística.

En este ámbito se celebran conferencias sobre varias de sus obras y su poesía en la literatura cubana, así como la actuación de Miriela Mijares y Estilo Propio que interpretarán varios de los poemas de la Loynaz.

Dulce María Loynaz nació en La Habana el 10 de diciembre de 1902. Su padre fue Enrique Loynaz del Castillo, general del Ejército Libertador, de cuya pluma brotó la letra del Himno Invasor y la madre, aficionada al canto, la pintura y el piano, fue la combinación que despertó en Dulce María un amor desmedido por la poesía.

En 1919 aparecen publicados en el periódico cubano La Nación, sus dos primeros poemas: "Invierno de almas" y "Vesperal". A los 24 años de edad, en 1927, se doctoró en Derecho Civil en la Universidad de La Habana y aunque esta profesión no era completamente de su agrado, la ejerció hasta 1961, siempre en asuntos de tipo familiar.

Su obra literaria revela la maestría en el manejo del castellano, decantación del lenguaje, poder de síntesis, claridad, sencillez y sobriedad en la expresión lírica. Estas y otras facetas fueron valoradas para otorgarle el cinco de noviembre de 1992, el Premio de Literatura Miguel de Cervantes Saavedra, que recibió de manos del Rey Juan Carlos. Su obra se impuso a la de otros ilustres e igualmente merecedores candidatos.

“Fe de vida”, su última obra, entregada al amigo Aldo Martínez Malo, con la condición de que solo se conociera cuando hubiese cumplido 90 años o después de su muerte, vio la luz en 1993, publicada por Ediciones Hnos.
Loynaz, en ocasión de celebrarse en Pinar del Río, el I Encuentro Iberoamericano sobre su vida y obra
En la madrugada del 27 de abril fallece "esta gran dama de América" que estuvo profundamente unida a los destinos y la cultura de su país así como a todo lo hispánico

 

0 comentarios