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Marilyn...del Cuyaguateje

ENTRE COPA Y COPA....

ENTRE COPA Y COPA.... Por estos tiempos se habla con mayor énfasis de otras drogas, entonces el alcohol parece tranquilo en sus lugares. Pero como estamos en diciembre, mes que incita a la alegría, y como que este parece que no se mete con nadie y no escandaliza, vayamos tras  él.La bebida está tranquila, en su devenir histórico, botellas que al vaciarse se venden a compradores para su cambio en las tiendas de materias primas, en tanto el líquido está ¨oyendo¨, como si no fuera una de las drogas conocidas que hace mucho daño en general, a las familias, los bolsillos…Los cubanos debemos estar vigilantes para que, de cara a nuevas urgencias en nuestro combate por la salud y la integridad moral de las personas, echemos a un segundo plano en nuestra percepción un problema igual de grave, sólo que más antiguo, solapado y persistente.Todo empieza en las manos que mecen las cunas. Los padres, quienes deben educar y hace tiempo les roban los cumpleaños a los niños. Se creen, o quieren creer que lo hacen, que con buenos regalos y una fiesta cara ya cumplen con ellos, pero incumplen desde el momento en que los alcoholes desplazan a los refrescos y los chicos se dan cuenta de que, inexplicablemente, se colaron en una fiesta de adultos, con todo lo que lleva.Allí, frente a ellos, se verifica en ocasiones la imagen más nociva que puede darse a los infantes: el semblante, complacido, de sus padres consumiendo alcohol. Ningún argumento posterior dirá a los pequeñines tanto como esa visión.Entre los signos de la incultura que aún debemos revertir está la de algunos patrones tristemente célebres que evidencian pésima orientación. La botella es todavía, querámoslo o no, un símbolo cubano de masculinidad. A tal punto lo es que cuando se dice abstemio -en verdad el idioma no ayudó en nada con una palabra poco atractiva la cual sugiere algo así como enfermedad incurable- se piensa en un esquimal recién llegado, por error al trópico.Entonces, el abstemio es casi un desafío en cualquier grupo, un bicho raro, no como Andrés el del spot televisivo, al cual hay que liquidar con cuatro tragos dobles tan pronto sea posible.En cuanto a ese líquido hay características discutibles. Unos dirían, destruyes tu cuerpo; otros ripostarían, aburres tu alma y otros, enfermarás. Hay ejemplos y ejemplos.Se entiende como buena recreación cuando tienes un buen pedazo de lechón asado a la diestra y, a la siniestra, alguna que otra botella para socializar las vacaciones. Lo más lamentable es que, de esa aspiración de vieja data, la parte más fácilmente conseguible en estos tiempos es la botella, en realidad la única prescindible.Sustituimos la playa por el portal, el puerco por la tilapia, pero el trago no suele delegar en sustitutos.Mucho se ha dicho, y falta más, sobre el asunto de las normas sociales en torno a las adicciones y los modelos pertinentes para asumir su previsión, combate y solución, por eso quita de tu mano esa copa que meces.

1 comentario

Dainarys -

Muchas gracias por tu comentario, no creo que sea factor suerte, los merengues han demostrado quienes son los mejores. No por gusto estamos en la cima.
Que pases una Feliz Navidad.
Un beso